Evangelio
del día:
Según San Mateo 10,16-23.
Yo los envío como a ovejas en medio de lobos:
sean entonces astutos como serpientes y sencillos como palomas.
Cuídense de los hombres, porque los entregarán a los tribunales
y los azotarán en las sinagogas.
A causa de mí, serán llevados ante gobernadores y reyes, para
dar testimonio delante de ellos y de los paganos.
Cuando los entreguen, no se preocupen de cómo van a hablar o qué
van a decir: lo que deban decir se les dará a conocer en ese momento,
porque no serán ustedes los que hablarán, sino que el Espíritu
de su Padre hablará en ustedes.
El hermano entregará a su hermano para que sea condenado a
muerte, y el padre a su hijo; los hijos se rebelarán contra sus padres y los
harán morir.
Ustedes serán odiados por todos a causa de mi Nombre, pero aquel
que persevere hasta el fin se salvará.
Cuando los persigan en una ciudad, huyan a otra, y si los
persiguen en esta, huyan a una tercera. Les aseguro que no acabarán de recorrer
las ciudades de Israel, antes de que llegue el Hijo del hombre.
Extraído de la biblia "Pueblo de Dios".
*****
Comentario del Evangelio por:
San Vicente de Paúl (1581-1660) sacerdote, fundador de comunidades
religiosas.
Conferencia del 21/03/1659.
"No seréis vosotros los que habléis, el Espíritu de vuestro Padre
hablará por vosotros"
Nuestro Señor Jesucristo pide
de nosotros la sencillez de la paloma, que consiste en decir las cosas con
sencillez, tal y como se piensan, sin reflexiones inútiles, y actuar lisa y
llanamente, sin disfraz, ni artificio, mirando a Dios solo; Para esto cada uno
de nosotros se esforzará por hacer todas las cosas con el mismo espíritu de
sencillez, pensando que a Dios le gusta comunicarse con los sencillos y
revelarles a estos sus secretos, los cuales tiene escondidos a los sabios y a
los prudentes de este mundo (Mt 11,25). Pero al mismo tiempo que Jesucristo nos
recomienda la sencillez de la paloma, nos sugiere usar la prudencia de la
serpiente, la cual es una virtud que nos hace hablar y actuar con discreción...
Nuestro Señor, diciéndoles a
los apóstoles que los enviaba como ovejas entre lobos, les dice al mismo tiempo
que tenían que ser prudentes como serpientes y sencillos como palomas. Luego
añade: "Tened cuidado; los hombres os llevarán ante los tribunales... por
mi causa. Pero cuando os entreguen, no estéis preocupados por lo que
diréis..." Habla primero de la prudencia y luego de la sencillez; la una
es para ir como ovejas en medio de los lobos, dónde corren riesgo de ser
maltratados. "Sed prudentes, les dice, estad alerta, y sin embargo sed
sencillos." "Tened cuidado de los hombres”: tened cuidado según la
prudencia; pero si sois llevados delante de los jueces, no temáis por vuestras
respuestas. He aquí la sencillez.
Ved que nuestro Señor une
estas dos virtudes, de suerte que quiere que nos sirvamos de ellas en la misma
ocasión; nos recomienda usarlas de igual manera y nos hace entender que la prudencia
y la sencillez se ponen de acuerdo cuando son bien comprendidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario